I
Ya están las Hermandades
en el camino;
marismas y olivares;
bosques de pinos.
Vino, jarana
y plegarias a ritmo
de Sevillanas.
II
Al pasar el río Quema
gasta cuidado.
No te mojes la falda
que te he comprado.
Pues, si se moja,
como es del mercadillo
puede que encoja.
III
Me ha encargado tu madre
que te vigile
cuando suenen las flautas
y tamboriles.
Que tienes novio
y no quiere que bailes
con ningún otro.
IV
Mira aquella carreta
que es del Alcalde.
Va pintada de blanco
con albayalde.
Que en el Rocío
se le olvida al Alcalde
su rojerío.